Fumar en el bar ya es historia
IDIOMA_FWK_FECHA_FORMATO_DIA_LARGOFuente: ABC
No hay vuelta atrás. El Congreso aprobó ayer la ley que elimina el tabaco de todos los espacios públicos cerrados y en zonas abiertas sensibles
El 2 de enero España se despertará con bares, restaurantes, discotecas y bingos sin humo. Ya no importarán los metros que tenga el local ni los sistemas de ventilación. No habrá zonas para fumadores, ni cubículos para dar rienda suelta a la adicción. Pese a las enmiendas de algunos grupos políticos, el Congreso de los Diputados aprobó ayer una ley del tabaco sin ambigüedades ni lugar para las interpretaciones. Representa el triunfo de los fumadores pasivos y de todo el colectivo médico que desde la primera regulación del tabaco en 2005 reclamaban una norma más dura. La nueva ley, una de las más estrictas de Europa, salió adelante con 336 votos a favor, cinco en contra y tres abstenciones.
Quedan aún flecos, como la financiación de los tratamientos para dejar de fumar. El texto aprobado se limita a dejar en manos de los consejeros la posibilidad de incluirlo en la cartera de servicios y de debatirlo en el Consejo Interterritorial de Salud, el órgano que coordina a las comunidades y al Ministerio de Sanidad.
Durante su discurso en el Pleno del Congreso, la ministra de Sanidad, Leire Pajín, calificó el día de ayer de «histórico». Y también tuvo palabras de apoyo para los grandes damnificados, el sector de la hostelería que ve en la prohibición de fumar la puntilla tras la crisis. Les pidió confianza y les animó a ver en la reforma «una oportunidad» para hacer nuevos clientes entre los no fumadores.
En su intervención durante el debate, Salvador Cervera, del Grupo Popular, se felicitó por la aprobación de la norma sin evitar reproches. Criticó que la norma haya eludido el paso por el Consejo de Estado y que no se hayan permitido habitáculos para fumar en los locales de ocio, una fórmula que «equilibraría» los intereses de la hostelería con la salud pública.
A los dueños de bares y restaurantes que hicieron obra para separar las zonas de fumadores y libres de humo finalmente no se les recompensará por el gasto. Una decisión del Congreso que CiU lamentó ayer.
La nueva ley como norma general, prohíbe fumar en todos los espacios públicos cerrados, con salvedades. He aquí una guía para no perderse:
Bares y restaurantes
No habrá opción para tomarse una copa con el pitillo encendido. Tampoco para fumarse un puro después de comer. Quien quiera fumar no podrá hacer la sobremesa en el local y deberá salir a la calle si no quiere correr el riesgo de que le multen. Como defendió en el Senado, el Partido Popular apoyó sin éxito una enmienda para que los establecimientos pudieran habilitar un espacio para sus clientes fumadores, los famosos «cubículos». El PP pedía que ese espacio ocupara el 30% de la superficie del local y que no entraran camareros para no perjudicar la salud de los trabajadores no fumadores. Con esta enmienda, el Partido Popular pretendía que la prohibición de fumar no sea la puntilla a una hostelería que se asfixia por la crisis.
Bingos y salas de juego
En Estados Unidos, uno de los pioneros de las restricciones del tabaco, las salas de juego son el paraíso de los fumadores. En España también se quería indultarles. En el Senado se dejó abierta esta posibilidad que ha fracasado en la Cámara Baja. Las condiciones eran similares a las que se pedían para bares y restaurantes, es decir que no ocuparan más del 30% de la superficie total del establecimiento y se instalaran en lugares donde no se juegue. Tampoco podría estar atendido por empleados. El PSOE fue el único grupo que no apoyó la iniciativa en la Cámara Alta y la ha tumbado en el Congreso.
Club de Fumadores
Como es lógico, se podrá fumar con libertad. Aunque se ha dejado muy clara las condiciones que deben tener estos establecimientos para que no se conviertan en uno de los coladeros de la ley. Se exigirán estatutos, censo de socios y que sean lugares sin ánimo de lucro. No tendrá personal, salvo los socios y no se podrá vender ningún tipo de producto. De esa manera se evita que bares y restaurantes sorteen la ley del tabaco e instalen clubs de fumadores en sus locales.
Hoteles
Tendrán que habilitar el 30% de sus habitaciones para fumadores y serán siempre las mismas para que los que no fuman no tengan que soportar ni los malos olores ni las partículas contaminantes del tabaco mientras permanezcan en la estancia.
Hospitales y geriátricos
En dos semanas, los enfermos no tendrán que cruzar por una nube de humo para ir al médico. No se podrá fumar en ningún centro sanitario, ni dentro ni a sus puertas. La única excepción son los geriátricos y psiquiátricos. La nueva ley permitirá que se habiliten zonas para fumadores en el interior de estos centros. El mismo principio se seguirá en las cárceles.
Parques infantiles y coles
Es otra de las grandes excepciones de la ley del tabaco. Para evitar dar un mal ejemplo a los niños no se podrá fumar en las puertas y perímetros de colegios y en las zonas de recreo de los parques infantiles, aunque estén al aire libre. La misma regla de los colegios se quería implantar para las Universidades, pero no ha salido adelante. Seguirá como ahora, no se podrá fumar en el interior del recinto, pero sí en el campus.
Plazas de toros
Los del tendido 7 de Las Ventas de Madrid podrán seguir fumando. La nueva legislación no acaba con el puro de los aficionados taurinos. Se podrá fumar, salvo si la Fiesta se celebra en plazas cubiertas. Mientras estén abiertas se podrá fumar y en el momento en que se cierre la cubierta habrá que apagar el puro o el cigarrillo.
Estadios deportivos
Aquí también rige la norma general. Sí se podrá encender un pitillo cuando los espectáculos sean al aire libre. En estadios de fútbol, por ejemplo, se podrá fumar. En instalaciones, como la Caja Mágica de Madrid, con cubierta practicable se seguirá la misma práctica que en las plazas de toros. Los cigarrillos se tendrán que apagar en el momento en que se cierre.
Terrazas
Depende. Sí estará permitido el tabaco en los espacios que haya una buena circulación de aire y no haya cerramientos. Por si hubiera alguna duda, la ley delimita lo que es un sitio abierto: un espacio con dos paredes y techo, como mucho.
Transporte público
Como hasta ahora, ni en taxis, ni autobuses, ni en el Metro, ya sea en vagones como en los andenes. Tampoco hay una excepción para los autobuses turísticos de dos pisos. No importa que el de arriba sea descapotable.
Aeropuertos
Desaparecerán todos los puntos para fumadores del interior de los aeropuertos. Ni siquiera se podrá en Barajas, donde aún sobrevivían algunas zonas de humo. Los pasajeros fumadores deberán salir a la calle.
10.000 euros de multa
Saltarse estas prohibiciones puede salir caro. Fumarse un pitillo en un lugar indebido, como un bar, puede costarle al infractor 30 euros. Pero las sanciones para los establecimientos que lo permitan van desde los 600 euros hasta los 10.000 si el local acumula denuncias y es reincidente. Aunque todo esto puede quedarse en papel mojado si las comunidades autónomas se declaran en rebeldía y no envían a sus inspectores de Sanidad a comprobar el cumplimiento de la nueva legislación. En los gobiernos autónomos recae la responsabilidad de inspección y sanción. A título personal, un ciudadano también puede denunciar en las correspondientes consejerías de Sanidad.